¿Por qué mi hijo de cuarto grado de repente dejó de hablar conmigo?

Responder:

No es inusual que los niños compartan más o menos información con sus padres en diferentes momentos de su vida. En cuarto grado los niños empiezan a compartir más con los amigos, y esto se traduce en que los padres se enteren menos de lo que les ocurre.

Tampoco es inusual que los niños conversen menos cuando algo los está molestando. Podría ser algo que está sucediendo en la casa, como que sus padres están discutiendo más a menudo, un miembro de la familia está enfermo o un hermano está teniendo problemas.

También es posible que las cosas hayan cambiado en la escuela, y por eso su hijo esté menos comunicativo con usted. Cuarto grado es un periodo de grandes retos para los estudiantes.

Por ejemplo, en segundo grado los niños aprenden a restar. En cuarto grado usan las restas para resolver un problema de lógica y discutir la solución en grupo.

Avances como estos pueden ser muy frustrantes para los niños cuyas habilidades no se han desarrollado completamente, y afectar su autoestima. En consecuencia, puede que estén menos dispuestos a hablar sobre la escuela, especialmente a alguien a quien le importa mucho cómo les está yendo en la escuela.

La vida social también cambia mucho en cuarto grado y es difícil adaptarse. Las conversaciones se vuelven más complejas. Las relaciones son más profundas, aunque sigan cambiando rápidamente. Es muy difícil que los niños con problemas sigan las conversaciones o entiendan las pautas sociales.

Dado que el cambio ha sido repentino, acérquese al maestro de su hijo. Hable sobre lo que usted ha venido observando en la casa y pregúntele si ha notado algo parecido en la escuela.

Tener esa conversación probablemente propicie que el maestro ponga más atención a su hijo. Después de pasadas algunas semanas, vuelva a hablar con el maestro para averiguar cómo van las cosas en la escuela y qué puede hacer usted para apoyar a su hijo.

En cuarto grado ocurren muchas cosas, y su hijo puede que sea menos comunicativo que antes. No obstante, hay maneras de ayudar a los niños a abrirse y hablar de la escuela y de otras cosas. Y aunque su hijo permanezca poco accesible, hágale saber que usted está ahí para ayudarlo.

Comparta

Próximos pasos