
De un vistazo
Las dificultades de un hijo pueden perjudicar la relación de una pareja.
Cuando los padres difieren al enfrentar las dificultades, la tensión entres ellos podría aumentar.
Las dificultades de un hijo podrían acercar a algunas parejas, si aprenden a trabajar juntos.
Satisfacer las necesidades de un hijo con dificultades de aprendizaje y atención, por lo general, significa que la relación de pareja toma un segundo lugar. Tienen menos tiempo para cada uno, y tener diferentes opiniones acerca de cómo ayudar a su hijo puede crear mucha tensión. Por eso es importante entender cómo las dificultades de su hijo impactan su relación de pareja y la necesidad de mantener esa relación saludable.
Cómo las dificultades de un hijo afectan a los padres
La crianza es un trabajo difícil (pero muy gratificante). Criar un niño con dificultades lo hace aún más difícil. Podría ser que con frecuencia sienta que es…
- Interminable. Los niños no pueden “apagar” sus dificultades así que usted siempre está “en alerta”.
- Demandante. Estar al tanto de todas las dificultades de su hijo exige una gran cantidad de energía, atención y organización.
- ¡Impredecible! Lo que usted haga para manejar la conducta de su hijo hoy podría no funcionar al día siguiente.
- Agotador. Planificar las citas con los profesionales y educar eficazmente a un hijo excesivamente activo puede ser agotador, incluso si comparte el cuidado de su hijo con su pareja. Los dos podrían cansarse.
Cuando mucha de la energía de la pareja está dedicada a su hijo, no es una sorpresa que haya poca energía disponible para alimentar la relación. También tiene que considerar que muchas parejas encaran las dificultades de aprendizaje y atención de su hijo de manera diferente. Esto es un factor que muchas veces causa fricciones en la relación.
Algunos estudios han mostrado que cuando una pareja tiene problemas, el estrés adicional de criar a un hijo con dificultades de aprendizaje y atención puede hacer que la relación fracase. Por otro lado, una relación que ya es sólida podría fortalecerse si la pareja puede trabajar de manera conjunta para satisfacer las necesidades de su hijo.
Aquí le presentamos algunos de los desafíos más comunes que las parejas enfrentan cuando tienen un hijo con dificultades de aprendizaje y atención.
Desafío de la relación #1: Diferentes maneras de responder a la situación
Descubrir que su hijo tiene dificultades de aprendizaje y atención puede ser devastador para los padres. Por lo general, los padres al recibir esta noticia pasan por un proceso de duelo que tiene seis etapas. La etapas incluyen el golpe, la negación, el enojo, la culpa, la aceptación y eventualmente la superación.
En una situación ideal, ambos padres se mueven a lo largo del proceso al mismo tiempo y pueden entonces apoyarse uno al otro. Sin embargo, no siempre este es el caso.
Por ejemplo, si el padre acepta las dificultades de su hijo más rápido que la madre, esto podría hacer sentir a la madre sola y triste. El padre podría sentir resentimiento, ya que siente que no cuenta con su pareja para decidir el tratamiento para su hijo. Esto complica el inicio de una situación que va a ser prolongada.
Desafío de la relación #2: Uno de los padres toma el liderazgo
Por lo general el que está a cargo del cuidado del hijo es el que primero ve los signos de una dificultad de aprendizaje o atención. Por lo tanto, ese padre es quien tomará el liderazgo en cuanto a llevar a evaluar a su hijo.
Si el otro padre está menos disponible para las citas con los especialistas, solamente se enterará de esta experiencia a través de su pareja. Esto podría hacerle sentir dejado de lado y que sus opiniones no cuentan, ya que no está presente para hablar con los profesionales directamente.
La persona que está a cargo todo el tiempo del niño podría sentir que no es justo que siempre le toque la responsabilidad de encontrar los recursos para ayudar a su hijo. Con el tiempo, podría sentir resentimiento porque su pareja no está más involucrada en esta situación que le compete a los dos. También podría pasar que el padre que está haciéndose cargo de la mayor parte de las actividades, tenga dificultad para hacer que su pareja se involucre en el proceso, ya que se ha acostumbrado a tomar las decisiones por su cuenta.
Desafío de la relación #3: Diferencias de opinión
Algunas veces, los padres no están de acuerdo acerca del diagnóstico o el tratamiento de su hijo. Por ejemplo, uno podría tomar los consejos de los médicos más seriamente que el otro. O quizá, los padres están de acuerdo con el diagnóstico pero no pueden ponerse de acuerdo en cuanto a la disciplina. Un padre podría pensar que el otro es demasiado permisivo con su hijo. El no estar de acuerdo en relación a su hijo, no solamente es frustrante para la pareja sino también problemático para el hijo, ya que podría sentir una falta de consistencia que lo confunda. A su vez, esto podría causar gran cantidad de problemas de conducta.
Desafío de la relación #4: Presiones económicas
Los padres podrían estar de acuerdo que un tutor, un terapeuta o cualquier otro servicio fuera de la escuela podría ser de ayuda para su hijo. Sin embargo, el pagar por ello podría agregar más presión a la relación de pareja pudiendo afectar incluso a las que son sólidas.
Desafío de relación #5: Todo gira alrededor de su hijo
Algunos padres podrían sentir que su relación gira alrededor de las dificultades de su hijo. Por ejemplo, obtener las citas con los profesionales y las reuniones en la escuela consume mucho tiempo. ¿Y cuando los niños están dormidos? La conversación a la hora de dormir podría girar alrededor de los horarios del día siguiente de su hijo.
Las dificultades de su hijo inevitablemente impactan las relaciones en algún momento. Afortunadamente, hay muchas cosas que usted puede hacer para suavizar este estrés. Conectarse con otros padres podría hacerle sentir menos solos. Construir una red de apoyo podría aliviar la presión de todos los días. Por otro lado, reservar tiempo para volver a conectarse con su pareja puede ayudarle a ver que su relación es más grande que las dificultades de su hijo.
Puntos clave
La naturaleza impredecible de las dificultades de aprendizaje y atención puede ser una carga para la relación de pareja.
Los padres que tienen diferentes posiciones acerca de las fortalezas y necesidades de su hijo podrían tener dificultades en su relación.
Construir una red de apoyo puede ayudar a aliviar la presión de los padres.
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Acerca del autor

Acerca del autor
Lexi Walters Wright fue la coordinadora de la comunidad de Understood. En su labor de escritora y editora ayuda a los padres a tomar decisiones acertadas para toda la familia.
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Molly Algermissen (PhD) es profesora asociada de psicología médica en Columbia University Medical Center y directora clínica de PROMISE.