Atención: En qué se diferencia de la memoria funcional

Attention: How it’s different from working memory, girl working at a computer at home

De un vistazo

  • Tanto la atención como la memoria funcional son esenciales para aprender nueva información.

  • La atención permite captar la información. La memoria funcional ayuda al cerebro a darle sentido.

  • Muchos niños que tienen problemas para aprender tienen dificultades con la atención, dificultades con la memoria funcional, o con ambas.

La atención y la memoria funcional son esenciales en la vida diaria y en el aprendizaje. Ambas son funciones ejecutivas que nos ayudan a adquirir y darle sentido a la información nueva. Y aunque están vinculadas, no son lo mismo. Aquí se presenta un breve resumen de lo que son.

Qué es la atención

La atención es el proceso que nos permite captar información y nos ayuda a seleccionar la información útil. Es como un embudo. Reúne lo que necesitamos saber y lo dirige a nuestra cabeza.

Existen cuatro partes importantes para tener buena atención. Los niños pueden tener dificultad con cualquiera o con todos estos elementos.

  1. Estado de alerta. Significa estar alerta y listo para poner atención.

  2. Seleccionar. Los niños deben poder identificar lo que merece atención. Por ejemplo, deben escoger poner atención al maestro y no a las voces en el pasillo.

  3. Mantener. Los niños deben poder mantenerse razonablemente atentos durante cierto tiempo. Esto puede ser sostener la atención durante un aviso que dura tres minutos o una clase de 40 minutos.

  4. Cambiar. Los niños deben ser capaces de desviar la atención brevemente cuando se presenta información nueva que es importante. Por ejemplo, deben ser capaces de enfocarse en un breve anuncio transmitido por el altavoz y luego volver a poner atención al maestro.

Los niños que tienen problemas de atención puede que no recuerden lo que se les ha enseñado. Esto se debe a que no lo “captaron” desde el principio.

Qué es la memoria funcional

Después de que la información ha sido colectada, el embudo de atención proporciona información al almacén a corto plazo del cerebro. Es aquí donde inicialmente se retiene la información nueva. Los expertos llaman a este proceso “codificación”. Es aquí también donde el cerebro manipula nueva información para utilizarla. Ese proceso es llamado “memoria funcional”.

La memoria funcional es un proceso activo y casi instantáneo. Nos permite usar información nueva y aprendida mientras estamos en la mitad de una actividad.

Imagine una clase de estudios sociales. El maestro está hablando sobre exploradores extraordinarios. Mientras los estudiantes atienden, sus memorias funcionales procesan la información que escuchan para que pueda tener significado y relevancia.

A menudo, esto involucra colocar pedazos de información en cierto orden. Podría ser en orden cronológico. Por ejemplo, los niños pueden colocar en un cronograma a Cristóbal Colón antes que a Pizarro, y pueden colocar lo que saben sobre Lewis y Clark después de Cristóbal Colón.

Los niños también pueden ordenar en categorías lo que escuchan o ven. Por ejemplo, pueden ordenar los exploradores según el país de origen o la región que exploraron.

Una vez que esta nueva información es procesada, abandona el almacén a corto plazo del cerebro y pasa a un “tanque” a largo plazo más grande. Si el maestro evalúa a los estudiantes al final de la clase, esa información será recuperada del tanque de la memoria a largo plazo.

Cuando los niños tienen dificultades con la memoria funcional, la información que almacenaron en el tanque a largo plazo podría estar desordenada. O puede que no tenga mucho sentido ya que no fue almacenada correctamente y, por lo tanto no sea muy útil. También puede causar que se pierda información y que no ingrese al tanque a largo plazo.

La atención, la memoria funcional y las diferencias en la manera de pensar y aprender

Aunque la atención y la memoria funcional son diferentes, ambas son importantes para el aprendizaje. Los niños con TDAH y con dificultades del funcionamiento ejecutivo tienen problemas con la atención y con la memoria funcional. Y muchos niños con diferencias del aprendizaje basadas en el lenguaje también pueden tener problemas en esas áreas.

A los niños que tienen varias condiciones como estas les puede resultar más difícil aprender. Pero entender dónde exactamente tienen problemas facilita ayudarlos a progresar.

Si usted sospecha que su hijo piensa o aprenden de manera diferente o tiene alguna dificultad con la memoria funcional, considere solicitar una evaluación. Una evaluación podría identificar las áreas problemáticas y ayudar a que la escuela de su hijo ofrezca las estrategias y el apoyo que necesita para aprender.

Si su hijo tiene TDAH, su doctor puede recetar medicamentos que también podrían ayudarlo. Inclusive, puede que hayan otras cosas que usted puede hacer en la casa para ayudarlo a mejorar su memoria funcional y desarrollar su capacidad de concentración.

Puntos clave

  • Los medicamentos pueden ayudar a algunos niños que tienen TDAH con su memoria funcional y sus dificultades de atención.

  • La memoria funcional es un proceso activo que manipula nueva información y la hace utilizable.

  • Una evaluación completa puede identificar las áreas en las que su hijo tiene problemas.

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